martes, 17 de abril de 2012

Los problemas de España.



Los problemas de España, están situado en el contexto mundial o globalización de la economía, los gobiernos de los estados poco podrían hacer si no es una acción concertada y decidida de tomar las riendas del problema desde el poder legalmente establecido, que son; los parlamentos y respectivos  gobiernos.

Los márgenes de maniobra de cada país y de su gobierno está en las prioridades que dicte la ideología de cada cual, y por tanto, un modelo de salida a la crisis profunda que soportamos.

El modelo económico escogido de salida a la crisis, desde las instancias europeas y fundamentalmente dirigidas por la Alemania de Merkel no es otro que el ultraliberalismo, (escuela austríaca). Esta ideología está en contra del Estado como el elemento de cohesión, como elemento de redistribución de las rentas, defendiendo la actuación de los estados solo en aquello que la iniciativa privada no puede alcanzar. Considera que el poder debe estar en los que poseen  el dinero, que teniendo apariencia de un medio, es el poder real y el fin único y, en la medida que da el poseer el objeto ajeno es un fin en , los medios de fuente de vida; el tener un sistema productivo que crea riquezas para el bien común, mejorando la calidad de la existencia, ya no es fuente de poder. Las estructuras sociales y los gobiernos estos en dejan de ostentar la gobernanza pasándose al dinero todo el poder, ahora eufemísticamente los llamados mercados, que no son otros que los bancos y entidades financieras. Compran, venden sin tener en cuenta el valor productivo, lo hacen en un solo día de modo que en la mayoría no llegan a depositar de forma fehaciente el valor de lo comprado.

Por tanto los gobiernos tienen dos formas de encarar el problema; dejando a los llamados mercados funcionar a su antojo sin reglas, o tomar las riendas política y legislar para frenar flujo de transacciones financieras sin control que está llevando a la ruina a Europa.

El nuevo gobierno de España, de ideología ultraliberal, está utilizando la crisis para imponer sus posiciones ultraconservadoras al servicio de la clase dirigente, o comúnmente llamados los poderoso, en esta lucha de clase, como reconocer el multimillonario Warren Buffet y, abunda en que su clase, la clase rica, es la que está ganando está guerra. Por tanto no es de extrañar que todas las medidas para salir de la crisis sean en perjuicio de los más débiles.

La descoordinación en los cien primeros días de gobierno de Rajoy, es descomunal, cada ministro dice lo contrario que el otro, y a su vez suman una tercera voz que es el portavoz del Partido Popular, en un intento de gobernar desde Génova, y no desde Moncloa, donde reside el poder Ejecutivo elegidos por los españoles. Pero creo que es una estrategia perfectamente calculada por el sociólogo que asesora a Rajoy. Una estrategia del caos, y en este caos ir tomando medidas de las cuales el Presidente del Gobierno no quiere aparecer como  responsable de las mismas. Para antes de un año tendremos remodelación de gobierno cambiándose los  ¨quemados¨ por otros. Que todo cambie para que siga igual.

En el contexto anterior el accidente de caza del Rey de España, parece más que un accidente fortuito, un accidente provocado por un infiltrado del PP, pues ha pasado la furia de los españoles contra el gobierno (una pérdida de apoyo en 8 puntos porcentuales y el suspenso de todo el gobierno) a la casa del Rey, también convenientemente sacado a la luz todas sus miserias. Es evidente que en los tiempos que corren las máximas figuras del Estado tiene que ser ejemplarizante en sus comportamientos y en sus gastos; no pueden hacer ostentación de lo que son: ricos, y refregárselo a los ciudadanos que no tiene ni para comer.

Con la oportunidad de este accidente, han colado los recortes en educación, con un modelo educativo de los años 80. La restricción en inversión pública es negar el futuro tan cacareado que tendremos una vez resuelta la crisis, será peor porque nuestros hijos y nietos estarán peor preparado que la actual generación de estudiantes. Recortan en la escuelas públicas, pero no en la concertada donde los alumnos serán menos por clase y dispondrán de más medios, que seguiremos pagando todos los contribuyentes. Un ministro al servicio de los ricos, mintiendo en los datos que da sobre otras universidades de otros países, afortunadamente hoy las redes sociales son rápidas en sacar a la luz las mentiras. 

Para la sanidad pública ya tiene el modelo a seguir; recortar y vender hospitales. No están dispuestos a oír que existen modelos diferentes sin tener que vender o recortar prestaciones, un modelo como ha demostrado la Junta de Andalucía es posible: la subasta de medicamentos  que pueden ahorrar entorno a doscientos millones de euros al erario público. De Guindo fue a la yugular de esta subasta, mintiendo, (lo norma en este gobierno), y Arenas amenazando con un recurso ante el Constitucional, apoyado por los laboratorios que se retiraron de la subasta promovida por la Consejería de Salud.  Los recortes en investigación en los hospitales públicos serán un destrozo en la investigación sobre trasplante, células madres, oncología, y en otros campos que tan buen resultado están dando los investigadores en Andalucía.

Estos capítulos no son gastos, son inversiones en el desarrollo de la sociedad de una forma sostenible y equitativa para todos los ciudadanos que viven en España. Una sociedad solidaria, una sociedad cohesionada, una sociedad que se siente como tal.

A este gobierno, esto le da los mismo, su ideología destructiva y acaparadora del poder en manos de unos pocos que implica la destrucción de las bases de esta sociedad tal como la conocemos, y en ello está. Para muestra un botón, Rajoy gobierna con notas de prensa aquello que afecta la inmensa mayoría de los españoles. Sin embargo monta toda la artillería y despliegue diplomático para la defensa de una empresa (Repsol) teóricamente española, que analizando la composición accionarial no resiste la denominación  española. -La propia Unión Europea lo ha situado en términos de un problema entre Repsol y Argentina-. Y todo ellos a cargo de los presupuestos generales del estado. Aquí no hay austeridad, ni en lo económico ni en los recursos humanos puestos a disposición de la petrolera, los mismos que tendrían que estar dedicado a los menesteres de defensa de nuestro país.

Por tanto la imagen que se está proyectando de España en el exterior es de una clase dirigente preocupadas en cacerías, problemas de cama, un presidente de gobierno huyendo de los periodistas para no dar explicaciones o, no tiene ni idea, o argumentos para opinar sobre la subida de la prima soberana o la caída histórica de la bolsa. Un Presidente que anunciaba que sólo por cambiar de gobierno habría confianza en los mercados. Un Presidente patriótico que solo rinde cuenta ante Merkel. Un Presidente que sólo sabe impulsar leyes represivas, amenazando con todo aquel que se manifieste acabará en la cárcel, tal como propone su ministro de interior.

El Presidente Rajoy solo habla de recortes, pero solo con recortes no se sale de la crisis, si no hay inversión entramos en las más profunda de la  recesiones. Para invertir hay que ingresar y esto lo tenemos si en vez de amnistía fiscal, colocamos a todo el aparato del Estado en cazar a los defraudadores. Con la amnistía fiscal solo se consigue que los defraudadores coloquen el dinero en depósitos bancarios pero no invertirán esos fondos. Es decir sólo beneficia esta medida a la bancas que tendrá depósitos a interés más bajo. Como siempre medidas para los mismos los que detentan el poder, quienes acumulan el dinero.

martes, 10 de abril de 2012

El Pacto de Izquierda, un soplo de esperanza.


El pasado día 25 de marzo los ciudadanos andaluces dieron  la mayoría electoral y social a la izquierda (PSOE –IUCA), ocasionando decepción en las filas del PP, en la cúpula empresarial, -que ya se estaban repartiendo el pastel- y en la derecha mediática, arreciando los insultos al uso, (cateto, inculto, subvencionado, etc.) hacia los andaluces por el sentido de sus opciones políticas. Con esto demuestran de que no se enteran de nada y mientras las vísceras les funcione más que el la razón, seguirán perdiendo elecciones tras elecciones en Andalucía.

La imagen, que esta derecha, quieren proyectar de Andalucía no se corresponde con la realidad, y es ahí donde chocan frontalmente con la mayoría de la población de esta tierra. 

Los andaluces sabemos como habitábamos hace treinta años, antes de que existiera la Comunidad Autónoma, que conquistamos en referéndum por la vía del famoso art. 151 de nuestra Constitución, y que hoy quieren cambiar en su lucha contra el estado de las Autonomías, centralizándolo todo en Madrid. Como siempre la derecha en su concepción centralista de España.

Los Andaluces conservamos fresca la memoria de cuando la gente se moría en sus pueblos  por no tener asistencia médica, ni hospitales cercanos, a los cuales unos porque no tenían posibles para pagar los gastos sanitarios, y otros porque las carreteras eran intransitables. O cuando el índice de analfabetismo, se cebaba con las clases populares y las mujeres en especial.

Andalucía hoy, con sus gobiernos progresistas, tiene una sanidad ejemplar, situándose entre las primeras del mundo, en redes de carreteras conectando capitales de provincia entre sí, y a su vez con todos sus municipios, por muy alejados que estén es un hecho indiscutible. La articulación ferroviaria. La investigación en el campo sanitario estamos entre los primeros de España, en la industria aeronaval igualmente, en las energías renovables, es decir Andalucía  no es lo que se proyecta desde la derecha ultramontana y los dirigentes del PP.

Las promesas del PP, todo el mundo aquí sabía que eran mentiras, tras mentiras, como se está viendo después de la elecciones, por ello los andaluces una vez más tirando de su sabiduría y a través del bagaje de las diferentes culturas, que durante siglos hemos ido alcanzando, y por otro lado,  sufrir el machaqueo y la dejadez de nuestra tierra por parte de los que tenían las propiedades y el poder, por ello, las  clase populares decidieron dar la mayoría a la izquierda, con un correctivo al PSOE, por sus casos de corrupción.

Esta es una oportunidad que se le presenta a la izquierda para realizar un gobierno de acuerdo con los intereses de la mayoría de los ciudadanos, y que le dé una salida progresista a esta crisis; defendiendo la sanidad, la educación, las políticas de dependencias y asistencia a los más bebibles. Una articulación solidaria de la sociedad. Una política en: I+D, en inversión pública buscando los mecanismo de colaboración entre la iniciativa público-privada, que permita la creación de empleo y reactive la economía de Andalucía.

Todo lo anterior será posible si se forja el acuerdo de la izquierda parlamentaria (PSOE-IUCA); las formulas posibles: 1) entrada en el gobierno de IUCA. 2) apoyo parlamentario con programa estable de gobierno, y comisión de investigación para depuración de responsabilidades en los casos de corrupción, y 3) Acuerdos parlamentarios durante el primer año, una vez resuelto los casos de corrupción, entrada de IUCA en el gobierno de la Junta  , en estos tres escenarios se podrían sentir cómodas ambas formaciones.

Lo que los andaluces progresistas no concebirán que la izquierda no se entienda, como esbozan algunos en IUCA (Sánchez Gordillo), sobre la tesis que es igual PP y PSOE, porque esto no es verdad y ahora que el PP gobierna en el Estado Español, comenzamos a ver las diferencias; en políticas de igual, en derechos de las mujeres, en asistencias de los más desprotegidos, en la propia reforma laboral, así como en la presencia de los poderes eclesiásticos que empieza a asfixiar a los que somos laicos.

Yo confió, y mucho, por las declaraciones de Diego Valderas, en que la izquierda asumirá su compromiso con los ciudadanos permitiendo un gobierno fuerte, para luchar contra los ataques que va a recibir Andalucía con el gobierno del PP,  totalmente partidista, revanchista y en permanente campaña electoral.

El futuro de IUCA dependerá de su actitud. Los ciudadanos andaluces le han dado la confianza  doblándole el número de diputados, que podía haber sido mayor, si no estuvieran los antecedentes de Extremadura y los errores del 94, cuando la pinza, que llevo a IUCA a sus peores resultados. IUCA tiene que reivindicar la transparencia en la gestión, evitando los casos de corrupción y el amiguismo, teniendo toda la legitimidad en ello.

El PSOE y IUCA tienen la obligación de entenderse y devolver la ilusión a la izquierda de este país, recuperar para el proyecto progresista en la defensa de los valores de solidaridad, igualdad de oportunidades a los jóvenes andaluces.

Esta oportunidad histórica, que a dado la mayoría de los andaluces al PSOE e IUCA, no la pueden derrochar, sería de una irresponsabilidad sobre el futuro del bienestar de Andalucía,  que se pagaría en las próximas elecciones, con su desaparición como fuerzas útiles

domingo, 1 de abril de 2012

Que todo cambien para que todo siga igual


La Administración del SR. Rajoy es la de grandes enunciados, y de aquello: ¨Que todo cambien para que todo siga igual¨, como dice Tomasi di Lampedusa, en El Gatopardo. Y en está están, hablan de reformas para ganar el futuro de nuestros nietos, algunos no llegarán a tenerlo por imposibilidad económica, a no ser que quieran traer al mundo indigentes. Gobierno que en el fondo y las formas lo basa en decretos leyes sin explicaciones, sin negociaciones con los sectores implicados, es decir al margen de la sociedad. La mayoría parlamentaria, no exime de las formas de gobernanza democráticamente. No quieren dar explicaciones de sus tropelías, seguramente porque no les sobran argumentos. Es gobernar autocráticamente.

Hablan de reformas como si las misma en sí, fueran la pócima para resolver los problemas del país. Las mismas propuestas que en el fondo y las formas nos devuelve al siglo XIX; empezando por la reforma laboral, donde la capacidad de negociación se deja empresa por empresa con lo cual todas las medianas se quedan fuera, y en las grandes donde el movimiento sindical puede ser más fuerte se le ayuda al amo con el despido gratuito y sin justificación, es decir volvemos al 1800.

La siguiente reforma consiste en desmontar el estado del bienestar, fruto de largas luchas del movimiento obrero y las clases populares, que ha dejado en las cunetas a munchos activistas.

En el siglo XIX se realizo la Desamortización de Mendizábal, consistiendo en la expropiación de los bienes de la Iglesia y fundamentalmente de la Compañía de Jesús, previo acuerdo con el Vaticano, que dio lugar al Concordato, por las cuales estuvieron cobrando ingente cantidad de reales. Pero de paso, para pagar la deuda pública de la Corona Española también se expropiaron los montes comunales y baldíos, en torno a los municipios, de los cuales vivían los pequeños labradores, que después no pudieron pujar por los lotes que se hicieron a no tener dinero para ello, debido que los lotes que se formaron eran inasequibles para los mismo, de esta forma cogieron las tierras la oligarquía, anulando el objetivo de crear una burguesía que diera riqueza al país. Y mandando a la población a hambre y la emigración. Lo mismo que pretende el ministro Wert con nuestros jóvenes más preparado, realizando un dispendio humano ha costa de  este país y sus familias, que bastante recursos económicos ha costado, para que ahora sean otros países los que crezcan en sus producto interior bruto, con su aportación. Esto igual que el Siglo XIX.

Hoy en día, los servicios públicos están a la venta para pagar la deuda pública que ellos mismo ha creado, y por supuestos las únicas empresas que pueden acceder a estos lotes; empresas de agua, hospitales, escuelas, guarderías, edificios públicos, en su momento ferrocarriles y seguridad social, todo aquello que de interés a la iniciativa privada, serán las grandes grupos empresariales, fondo de pensiones, empresas financieras,– que nosotros mismo colocamos nuestros ahorros y el Estado su liquidez--,  y la lista seguirá.

La nueva Alcaldesa de Madrid (elegida para concejal, y lo de Alcaldesa se lo ha encontrado por la apetencia de Ruiz-Gallardón de ser Ministro), ha anunciado la venta de patrimonio de la Ciudad de Madrid, los mismos que llevan gobernando desde Álvarez del Manzano, incluido el manirroto Ruiz-Gallardón. Como podemos apreciar los mismo que en el Siglo XIX, entonces fueron tierras y ahora son edificios y empresas rentables de los municipios, de las autonomías y del estado.

Hoy podemos ver al marido de la Sra. Cospedal metido en las empresas que van a pujar por los hospitales y TV de Castilla la Mancha, que seguramente se la adjudicarán. El expolio de lo público será como en Valencia, donde gobiernan desde el año 1999, es decir, trece años, por tanto no pueden echarle la culpa a Zapatero de la quiebra actual de la Comunidad Valenciana. Veremos a familiares y amigos de otro prócer del PP metido en el expolio del Estado del Bienestar con el argumento de la deuda pública. Como decía Lampedusa: gente que piensan más en el ¨como¨ que en el ¨por qué¨ capaz de enmascarar, quiero decir combinar,  sus intereses particulares concreto con la vaguedad de los ideales políticos. Es los que tenemos en el poder.

En la época de Aznar se desnacionalizaron y colocaron amigos en todas las empresas de propiedad públicas con el objetivo de dar mejor servicios a los ciudadanos. Hoy tenemos pero servicios en telefonía y en electricidad que antes, creándose además  oligopolios, todo lo contrario con lo que se nos vendió: la competitividad era buenas para los consumidores; pero la leyes de los mercados ha llevado a la concentración de las empresas y por tanto perjudicando al ciudadanos al no tener elección de quién quiere que le preste el servicio.

Es importante saber contra que luchamos y estamos luchando; contra la ideología neoconservadora, donde el lugar que se le deja al estado es los aparatos coercitivos; Ejercito, policía y judicatura, resto se la aplica la teoría de Darwin, de la evolución de las especies, donde el más fuerte o que se hace más fuerte triunfa y vive en la abundancia, con todas las comodidades, ellos y sus descendientes y el resto, a malvivir; trabajando por la comida y poco más. Este es el mundo que están dibujando, incluidos los eclesiásticos contrario a la teoría de la evolución. 

El concepto solidaridad, estado del bienestar, apoyar a los más débiles desaparece del lenguaje de esta derecha neoconservadora, lo moderno y propio del siglo XXI, es ahora, parece ser, volver al siglo XIX. 

Las elecciones Andaluzas, del 25 de marzo, ha supuesto un revés para estos objetivos. La ciudadanía en su mayoría progresista, demanda una salida de la crisis con políticas progresistas; defensa de la sanidad pública, así como la educación y los servicios esenciales. Una política de solidaridad con los más débiles. Un frenazo al desmantelamiento del estado del bienestar.

Hay que reducir gasto, pero no a costa del salario indirecto de los ciudadanos. Esta crisis creada para que los poderosos acumulen más poder, como ocurrió en las desamortizaciones que se hicieron en toda Europa en los años que van desde 1700 hasta 1900, aproximadamente.